viernes, 28 de noviembre de 2014

Rojos

Alguien murió anoche en mis pesadillas.
Se lanzaba al vacío bajo mi ventana,
dando vueltas de campana,
abrió su cráneo contra una alcantarilla.
Y unos brazos sin rostro se acercaban,
a recoger su cuerpo mutilado.
Pero desperté sobresaltado por un salto.
Salí del trance y del espanto,
al recordar tu cara.
Al recordar tus labios.
Rojos.

¿Sería yo el pobre diablo?
¿Serías tú quien me salvaba?
¡Para!


Rojos…